Publicado por Por qué es importante: una fábrica que dividió una ciudad.
La decisión de Tesla de ubicarse en Grünheide, estado de Brandeburgo, y la velocidad con la que se construyó la fábrica (861 días) fueron motivo de orgullo para los políticos locales en un país conocido por sus onerosos procesos de obtención de permisos.
La fábrica, inaugurada hace dos años, también se ha convertido en un importante motor de crecimiento en este estado federado, que durante mucho tiempo ha sido uno de los más problemáticos económicamente de Alemania. Brandeburgo registró un crecimiento económico del 6% en el primer semestre de 2023, impulsado en gran medida por los 11.000 puestos de trabajo en la planta y las docenas de proveedores que han surgido a su alrededor.
Pero muchos residentes locales dicen que la planta ha alterado la calidad de vida que los trajo a Grünheide y amenaza la calidad del aire y el agua.
Algunos argumentan que Tesla ya tenía derecho a construir almacenes y un patio de ferrocarril en los 740 acres existentes donde se encuentra la fábrica. Acogieron con agrado la oportunidad de opinar sobre el asunto.
«Es la primera vez que se pregunta a los vecinos y la respuesta es muy clara», afirma Steffen Schorcht, activista de la Bürgerinitiative Grünheide, que se opone a la ampliación. «Esperamos que los políticos respeten eso».
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El ministro de Economía de Brandeburgo, Jörg Steinbach, dijo que la votación reflejaba la persistente incertidumbre de la gente sobre el fabricante estadounidense de vehículos eléctricos y que correspondería a los políticos trabajar más duro para convencerlos de cómo su presencia beneficia a la región.
«Veo el resultado de la votación como una motivación para que el municipio y Tesla aborden preocupaciones conceptuales no resueltas en las próximas semanas y meses», dijo Steinbach.
Qué sucede después: La decisión depende del ayuntamiento.
Christiani se alegró de que votaran más del 70 por ciento de los electores en Grünheide. Pero destacó que el plan rechazado también incluía desarrollos de infraestructura que eran importantes para la comunidad en general y que debían abordarse.
La decisión final sobre cómo proceder corresponde al ayuntamiento de Grünheide. No ha incluido el tema en la agenda de su próxima reunión, en marzo, y los funcionarios se han negado a comentar cuándo podría suceder eso. El organismo celebrará su última reunión antes de las elecciones locales a mediados de mayo.